¿¿ ** Lees entre lineas** ??

Al final te daré las gracias, porque por un instante he cambiado todos mis sentidos, cambié mi forma de pensar y a partir de aquí ya no…

Gracias a ti aprendí de mis errores, volví a perder, pero vuelvo de aquella batalla, perdida, cubierto de lecciones, lecciones que aprendo sobre la marcha, en la vuelta al rail de mi vida…

Gracias a tus recuerdos, aprendo cada día a olvidar, a ahogar mis sentimientos, a desaparecer cuando asomen la cabeza y no querer saber como han aparecido, sin más, asfixiar los recuerdos en el cajón mas oscuro de mi memoria, para que nunca pueda llegar a abrirlo, para jamás volver a evocarlos…

Gracias a todo esto he aprendido a callar…lo más importante, a no decir una palabra antes que nadie, a ser siempre el pestillo de mis secretos, a silenciar mis pasos por el pasillo del afecto, donde no despertaré a nadie ni a nada…nada volverá a despertar…

Gracias por no haberme dejado para septiembre aquellos temas que no estudié, y dejarme para el mes de noviembre que aprobara de una vez. Gracias por reconducir mi vida por la via que merece realmente la pena… Y aunque inconscientemente me hayas ayudado a percibir el cuento de mi historia de otra forma distinta, amoral o sin moral…para nada…

Gracias, pues si antes creía difícil traspasar la coraza de mis recuerdos, de mi “razón”…basta!! …de mi corazón…ahora ya, como si de niebla se tratara sobre la reminiscencia de mi piel, reconstruye las heridas del ayer, mis heridas, de la batalla que te comencé a comentar…me recuerdan el dolor de las armas del cariño, me alejaré cuando vuelva a aparecer, desapareceré cuando despierte querer…

Pero dejaré entrever un poco la realidad entre renglones, y seguro volveré a perder…volveré a luchar y perderé, todo esto no es más que una vaga ilusión, una quimera de mis sentidos, para engañarme, anestesiar mi “razón”, cerrar con llave aquel cajón, que remedio…sin más remedio… porque todo esto, no es más que una mentira absurda, grabada en mi piel…a fuego mientras observo la cálida mirada mía, comprendo que nunca podré pensar como expreso, para evitar perder… con todo, el secreto de esto; es que te doy las gracias por aparecer…y por más que me encierro entre las lecciones de mi vida, aun no conseguí ponerme de parte del caballo campeón, de parte del bando ganador…

Por eso escondo mis verdades en cualquier esquina remota de los cuadernos de mi historia, de mi vida, para leerlos si hace falta, para mí, y no publicarlos en los secretos de tu memoria, para evitar que se ahoguen los seguiré leyendo “ piano, piano”, para que no llegue a los oídos inquietos de la suerte de tu vida, para que no se escapen entre tus dedos, entre las yagas de tu ser…

Y a pesar de todo, incluso te daré las gracias…