sábado, 8 de marzo de 2008


Una madrugada, dos, tres… y vuelta a empezar,
vuelvo a caer sobre tu pecho, vuelvo a dormirme en la humedad de tu boca…
Respira despacio, que note mi cuerpo la ansiedad
de tus labios…desnúdate el alma y luego, ven a verme junto a mis sueños… quiero verte así,
simple, tranquila, serena, sin miedos que puedan desmaquillar tu piel…

Arráncate la piel para que pueda sentir cada herida, cada reminiscencia grabada a hiel en tu sangre… ven a verme a mi portal cada noche, como solías hacer
y desnuda cada silencio con una sonrisa,
ven y juega con mi orgullo de nuevo en mi almohada… que yo,
te esperaré, sentado en el lugar, que nos unió a los dos…
solo si logro recordar dónde…

Como cada noche, antes de dormir… ven a verme… y guarda para mi cada instante importante de tu día, guarda cada secreto para que pueda robarlo de tu labio, de tu lengua…
Ven antes de irte, como aquella noche, aquella en la que huiste sin hacer ruido para no regalarme un adiós…aquella en la que te marchaste con dos palabras en el bolsillo, sin saber como utilizar… sin más explicación que un beso tras el cristal que protege cada corazón… para dejar la menor huella posible… pero te fuiste… te fuiste y dejaste más que eso…

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